Videoclips, aplausos y acarreados en el II Informe
Morelia, Michoacán. En un evento nutrido de videoclips, cifras y más cifras, aplausos y más aplausos y un millar aproximado de acarreados, el alcalde Alfonso Martínez Alcázar rindió en el Teatro Morelos el II Informe de Gobierno al frente del Ayuntamiento moreliano.
Después de la sesión de Cabildo –realizada en el Ayuntamiento a las 08:00 horas, donde los regidores le impugnaron el formato para informar sobre el estado que guarda la administración pública municipal-, Martínez Alcázar arribó al Teatro Morelos en el Centro de Convenciones bajo las porras de organizaciones de colonos, de transportistas e incluso de militantes del Movimiento Antorchista, con quienes se dejó apapachar, saludó y hasta selfies se tomó.
Fuertemente custodiado por elementos de la Policía Municipal, el recinto parecía inaccesible entre los casi un millar de acarreados que llegaron en microbuses hasta el área del Centro de Convenciones, identificados por las playeras de sus organizaciones y donde destacaron con sus gritos y porras los antorchistas.
Entrevistado antes de ingresar al foro del Teatro por dos televisoras locales que instalaron su staff en el vestíbulo, el alcalde que llegó al gobierno municipal con la bandera de las candidaturas independientes en el 2015, aludió en su mensaje al “rescate” de la ciudad para el turismo y “para las familias morelianas” con el proyecto de peatonalización.
Aludió a los críticos de su gestión, como quienes “se preocupan porque se acabaron los favores”, al igual que sentenció que “el espíritu ciudadano es una fuerza que ya no se detiene”.
Peatonalización, Parque Lineal, una baja de 24 puntos en el índice de homicidios dolosos en Morelia, 28 auditorías –que convierten a su administración, dijo, en la 560 por ciento más auditada que otros gobiernos municipales-, pago de reestructura de deuda en agosto por 161 millones de pesos, séptimo lugar en el Sistema de Administración Tributaria a nivel nacional por el manejo “eficiente” de recursos, 13 mil nuevos empleos y atracción de inversiones con empresas que en el corto plazo generarán 2 mil 500 nuevas plazas laborales, se desgranaban en el discurso triunfal del alcalde, en medio de seis videoclips que se mostraron al público que abarrotaba al tope el Teatro Morelos.
Y seguían las cifras y las frases luego de cada video: Mil 992 hectáreas del área rural apoyadas con fertilizantes, con huertos, con animales para cría, atención a la mujer con dos módulos, lograr 470 policías y alcanzar la meta de 800 para la ciudad a finales de año, 18 millones de pesos aplicados a proyectos para jóvenes, la creación de la Secretaría de Cultura municipal y más de 500 hectáreas reforestadas nutrían el discurso edilicio, para rematar con las “más de 500 obras realizadas, más que las realizadas en total por cualquier otra administración”.
Invitados de un color y de otro, acompañaron al alcalde. Desde el gobernador Silvano Aureoles Conejo –a quien en reiteradas ocasiones Martínez Alcázar agradeció el apoyo a su gobierno el mandatario regiomontano Jaime Rodríguez “El Bronco”, Miguel Mancera, gobernante de la Ciudad de México y actual presidente de la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago), Luisa María Calderón Hinojosa, Marko Aguilar Cortés, Marcos Aguilar Vega, alcalde de Querétaro, Salvador López Orduña, ex alcalde moreliano, el arzobispo Carlos Garfias, Fausto Vallejo Figueroa, ex gobernador,los presidentes de los poderes Legislativo y Judicial, Pascual Sigala Páez y Marco Antonio Flores Negrete respectivamente y… Fidel Calderón Torreblanca, diputado federal perredista, para quien el munícipe moreliano pidió un aplauso tras agradecer por haber gestionado recursos para la reconversión a uso de gas de mil 200 unidades del transporte público, que dio por un hecho cuando el proceso aún está en marcha.
El tema de la inseguridad y contar con una corporación policial fue uno de los temas –además del de las 500 obras realizadas-, más festinado por el alcalde. Señaló que la meta es contar con mil 200 elementos al final de su gobierno; cuando se inició, dijo, había 120 elementos, actualmente se hay 400, y espera que sean 800 a finales del 2017. Justo a los uniformados, antes de ingresar al recinto del Teatro, los felicitó y agradeció por apoyar las tareas de su gobierno, lo mismo hizo con los cadetes que actualmente se preparan en la Academia de Formación Policial y los conminó a una buena preparación “porque los ciudadanos ya los están esperando”.
Sobre las obras del Ramal Camelinas, que en ningún momento aludió por su nombre y donde ciudadanos y ecologistas han presentado una férrea oposición al proyecto, el alcalde dijo que “en la zona de Santa María”, estaba a punto de resolverse la conflictividad vehicular. Por la mañana, en la sesión de Cabildo en el Ayuntamiento, ante los regidores aludió a que “unos cuantos” se oponían a la construcción de las vialidades con “un no rotundo, gritón” ante el “sí mayoritario”.
Martínez Alcazar reconoció que no ha sido fácil gobernar Morelia. Citó que en materia de seguridad, “hay mucho por hacer” y pidió “redoblar los esfuerzos” para que al final de su administración sean mil las nuevas obras con las que cuenten los morelianos.
En su intervención, el gobernador Silvano Aureoles Conejo –quien no dejó escapar un recuento de acciones apoyadas por su administración en el municipio-, señaló que seguirá la coordinación entre su gobierno y la del independiente, sobre todo en fortalecer la seguridad con apoyo de la Federación, alentar las inversiones para generar empleos y planteó la necesidad de apoyar la reforma a la Ley de Coordinación Fiscal que permita mayores recursos a los municipios.
Acabó el evento y la salida del alcalde y sus invitados alborotó otra vez a los adormilados que, al son de la banda, retomaron sus porras y aplausos. Policías y cadetes que permanecieron casi dos horas en formación bajo el sol y los empellones de la multitud, seguían con la vista el tropel de este domingo en el Centro de Convenciones.