Sindicato del OOAPAS recibe 322 millones de pesos anuales, entre salarios y prestaciones
Rodrigo Caballero/ @RodCaballero
Morelia, Michoacán.-Como “privilegiado” fue la forma en que el secretario administrativo de Morelia, Yankel Benitez Silva, calificó al Sindicato de Trabajadores Asalariados del Organismo Operador de Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento (STAOOAPAS) de Morelia.
Este privilegio deriva de las prestaciones laborales y los sueldos que alcanzan los 35 mil pesos mensuales en promedio y absorben 80 centavos de cada peso que recibe el OOAPAS diariamente.
Esa cantidad de dinero que se aplica en los salarios y las prestaciones de sus empleados sindicalizados equivale a unos 26 millones 915 mil pesos que van a dar directamente a sus bolsillos mensualmente y alrededor de 322 millones de pesos anuales que se disuelven en dicho concepto.
Estos 322 millones de pesos -usados en salarios- superan por más del doble a los 130 millones de pesos que fueron presupuestados en 2015 para obras hidráulicas en la ciudad de Morelia. Una ciudad en la que el 40 por ciento del agua potable se desperdicia en fugas.
En total, 769 afiliados al STAOOAPAS, absorben el 80 por ciento de los ingresos que tiene el organismo anualmente, tanto por apoyos gubernamentales como por pagos de usuarios del servicio de agua potable y alcantarillado.
Y es que los “privilegios” del STAOOAPAS no son pocos, de acuerdo con su Contrato Colectivo de Trabajo del que Michoacán TresPuntoCero tiene una copia, las prestaciones laborales les ofrecen sueldos que superan el promedio de los agremiados al Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE).
Recompensas y premios millonarios
Cabe mencionar que todos estos “privilegios” en realidad son prestaciones con todas las de la ley. Un anexo del Contrato Colectivo de Trabajo del STAOOAPAS muestra el listado de prestaciones a las que tienen derecho los empleados sindicalizados del operador de agua potable.
Estas prestaciones incluyen varias indispensables para los trabajadores mexicanos como son el aguinaldo, el fondo de jubilación, prima vacacional y fondo de ahorro para eventualidades.
No obstante, la mayoría son premios como el apoyo familiar, prima vacacional, despensas alimenticias, prima quinquenal, premio a la puntualidad y apoyo para la superación personal. Así como una cláusula que obliga al OOAPAS a pagar el Impuesto Sobre la Renta de sus propios trabajadores.
Todas estas recompensas provocan que el sueldo promedio de los trabajadores se eleve hasta 23 mil pesos anuales, siendo que el OOAPAS es un organismo con un déficit que llegará a los 120 millones de pesos en 2016.
El déficit lo pagamos todos
El principal problema que acarrea un sindicato tan “privilegiado”, según el secretario administrativo Yankel Benítez, es que convierte al OOAPAS en una empresa que gasta mucho en sueldos y no se puede mantener a sí misma.
Con el tiempo explicó Benítez, gastar más de lo que se invierte provoca déficit que en el caso del OOAPAS es de más de 60 millones de pesos y alcanzará los 120 millones de pesos a finales de este año.
Además, por tratarse de un contrato legal firmado entre el STAOOAPAS y las autoridades del OOAPAS, sus cláusulas son irrevocables, lo que significa que no se puede reducir la cantidad de dinero que se gasta en sueldos sin trastocar los intereses del sindicato y sus trabajadores.
Con esa válvula cerrada, el OOAPAS solamente puede reducir su déficit con el subsidio del Ayuntamiento de Morelia. De hecho, en lo que va de la administración de Alfonso Martínez Alcázar, este subsidio ya superó los 20 millones de pesos.
Lo que provocó que el alcalde moreliano anunciara una reducción del subsidio que se proveerá al OOAPAS en 2016, lo que implicará una inversión en el organismo de 24 millones de pesos para “sanear” sus finanzas.
Esos 24 millones de pesos quedan muy lejos de reducir el déficit que se espera en 2016, lo que lleva al tercer inversionista de la ecuación, los usuarios del servicio de agua potable y un posible aumento a la tarifa del agua.
El agua más cara de México
De acuerdo con el tesorero municipal de Morelia, Gabriel Guzmán Díaz, una forma de combatir el déficit que enfrenta el OOAPAS requiere “del apoyo de todos” y contempla un incremento a la tarifa del agua potable, misma que en 2013 y 2014 fue considerada la más cara de la República Mexicana.
Aunque todavía no se conoce el incremento del costo, el tesorero de Morelia aseguró que buscará mitigar el déficit de 120 millones de pesos que tiene el OOAPAS y viene arrastrando desde 2007.
“La solución requiere de un estímulo financiero por parte del Ayuntamiento de Morelia, así como una contención salarial del Organismo Operador que tendría que ser mayor a los 37 millones de pesos” apuntó el tesorero.
Esto significa que, a fin de reducir el déficit, el Ayuntamiento otorgará un subsidio de alrededor de 24 millones de pesos, el OOAPAS tendrá que reducir algunas prestaciones en las cláusulas del contrato colectivo que ahorren más de 37 millones de pesos y el resto –casi la mitad del déficit- lo pagarán los ciudadanos de su propio bolsillo.
Tomando en cuenta sus cálculos, el aumento del agua oscilará entre el 10 y 12 por ciento para cada usuario, siendo el mayor aumento del agua desde que el OOAPAS opera en la ciudad de Morelia.
Imposible reducir salarios
Actualmente, el Ayuntamiento de Morelia apela a la contención salarial de algunas de las cláusulas que sustenta el STAOOAPAS, todo para que aporte más de 37 millones de pesos en el déficit del organismo.
Sin embargo, al menos respecto al salario, el sindicato de la paramunicipal no permitirá reducciones según su propio contrato colectivo. En la novena cláusula del contrato señala lo siguiente “los salarios de los trabajadores no podrán ser reducidos por ningún concepto”.
Y aunque hay excepciones que apuntan a los créditos del Infonavit, Infonacot y cajas de ahorro, estas contenciones no tocarán ni un peso de salarios de trabajadores. En concreto, sólo se podrán tocar los 23 mil pesos anuales en cuestión de prestaciones salariales y esto no sirve para combatir un déficit de 120 millones de pesos.