Se intensifican asaltos en la calle Abasolo, en pleno Centro Histórico

Un promedio de diez establecimientos en tan solo dos tramos de la calle Abasolo, han sido objeto de la delincuencia en dos meses y que van desde la invasión y robo de equipos a una clínica de especialidades médicas, hasta el asesinato del propietario de un vehículo que se resistió a su robo.

Ubicada a escasas tres calles del Ayuntamiento en pleno Centro Histórico, donde es recurrente el paso de patrullas y operativos de elementos a pie, los robos y agresiones en contra de propietarios de comercios se agudizaron en este año, ya que tan sólo en los dos últimos meses aumentaron los hechos delictivos, según reportes de los afectados.

De acuerdo con el encargado de un establecimiento, en su caso le robaron una microondas de su cafetería, ubicada en el acceso de un hotel, hecho que ocurrió a plena luz del día y fue captada por las cámaras de seguridad instaladas en la negociación.

Otros comerciantes, refieren que la mayoría de los asaltos se han registrado en el día e incluyen el amago con armas por parte de sujetos que entran a sus negociaciones y se llevan objetos o el efectivo con el que disponen. Tal fue el caso de una tienda de artículos musicales, donde empistolados actuaron con toda la tranquilidad no obstante que a una cuadra y por algunos minutos al mediodía, se estaciona una patrulla de la Policía Municipal. “Curiosamente cuando está la policía no pasa nada, pero apenas se van y ocurren los asaltos”, señalan.

Un negocio “visitado” varias veces por los delincuentes es una tienda de telefonía celular, donde la presencia de una sola dependiente tal vez lo haga vulnerable, para susto de quien atiende el negocio ya que hasta en dos ocasiones ha sido atracada con la pérdida de aparatos y recursos en efectivo.

Otro caso es el de una clínica de especialidades médicas, aunque en este caso los hechos ocurrieron por la noche, aunque no dejan de destacar el cómo fue que los delincuentes sustrajeron equipos especializados de alto costo y cuya manipulación incluso es difícil por su tamaño y peso y que suponen entraron por la azotea de la negociación.

Los comerciantes destacan un hecho para poner de manifiesto el clima de aparente seguridad con la que actúan los malhechores: En una sastrería, entraron unos asaltantes para pedir sin más las llaves de un automóvil al dueño de la negociación, un modelo clásico que siempre estacionaba a las afueras del negocio, y quien al resistirse fue baleado y murió ahí mismo. Los delincuentes se llevaron el vehículo y hasta donde saben, no hubo ninguna investigación sobre el caso, como afirman que ha sido en todos los asaltos y agresiones reportadas, tanto ante los elementos policiacos como en las oficinas de la Procuraduría estatal y la Policía de Morelia.

La mayoría de los negocios asaltados en la calle Abasolo se ubican desde su cruce con la de Corregidora y hasta la Plaza de Carrillo.