Bajo peritaje, 27 inmuebles afectados por explosiones del Túnel 2
Propietarios de 27 inmuebles en la Colonia Ejidal Ocolusen, de un total de 50 casas habitación afectadas por las explosiones en el Túnel 2 del Ramal Camelinas, esperan los resultados de un peritaje independiente para demandar ser indemnizados por la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), a cargo de la obra, como parte de fondos establecidos para “´prevenir reclamos de daños”.
Muros y pisos agrietados, además de fracturas en aljibes y soportes, principalmente, son las afectaciones generadas por la serie de explosiones realizadas en el transcurso del 2017 con la oposición de los vecinos de la calle Baltazar Echave en la Colonia Ejidal Ocolusen.
En la última auditoría a la obra, la Auditoría Superior de la Federación estableció que el uso de los explosivos no estuvo sujeto a regulación alguna, ya que la SCT “no tenía al momento de la firma del contrato 201516CEA012w002015 el permiso correspondiente para la adquisición, traslado, manejo, almacenamiento y uso de explosivos”, según la denuncia que plantearon integrantes del Movimiento Ciudadano en Defensa de la Loma ante la Oficina Regional de Naciones Unidas sobre Reducción de Riesgos por Desastres.
Para los integrantes del MCDL, el peritaje sobre los 27 inmuebles más dañados está en marcha y, se espera que tras los resultados se logre acordar un fondo de indemnización que les permita resarcir las afectaciones. De acuerdo con los voceros del MCDL, la SCT insiste en afirmar que no hay denuncia ante la dependencia de daño en los inmuebles, cuando la misma fue enterada desde el 31 de mayo del 2017, cuando un vecino fue a reportar daños causados por las explosiones.
De acuerdo con los voceros del MCDL, quienes exhibieron un listado de casas, la SCT presuntamente ya reconoce afectaciones en los 27 inmuebles donde se aplica el peritaje de manera independiente por los colonos, independiente “porque no creemos en la SCT”, afirman.
Cabe señalar que la obra tampoco cuenta con dictámenes de Protección Civil en sus tres niveles, además de incumplir las recomendaciones de expertos de la UNAM, que plantearon un cambio de ruta en la trayectoria de la obra para evitar riesgos.
Propietarios inconformes
Guadalupe Ángel Villaseñor, colono afectado, señala que la afectación alcanzó a una barda en su inmueble, “que se está cayendo”, además de fracturas “en la columna que va a la parte superior, de 30 centímetros, y por ahí fue una perito y me dijo que la barda no se podía incluir, porque está mal cimentada, me dijo, pero yo le dije que no la había hecho para aguantar explosiones, porque temblores ha habido muchos y no ha pasado nada. Les mandé fotografías, del 31 de mayo, de unas fracturas muy pequeñas, y tengo otras de ahora, en el estado en que se encuentran”.
“Hay daños en mis recámaras, en las losas y en fin, una serie de irregularidades”, narró el colono.
“Me siento hasta impotente, porque fue trabajo de 30, 40 años, para llegar a tener un patrimonio y ahora me lo han destruido y no me quieren pagar nada”.