OOAPAS, ineficiente en el sur de Morelia
César Vázquez / @LetraMia
Morelia, Michoacán.-La Procuraduría Ambiental de Michoacán (ProAm) continúa inspeccionando la región de la Loma de Santa María, donde se han descubierto diversas descargas de agua deficientes y donde el OOAPAS no ha cumplido con sus obligaciones de regular y administrar adecuadamente las aguas residuales.
“El organismo ha respondido a lo que solicitamos, pero descubrimos deficiencias en el servicio, ahora debe tomar cartas en el asunto la Comisión Nacional del Agua (Conagua), que es la autoridad máxima en la materia y quien debe condicionar a la paramunicipal”, explicó Arturo Guzmán.
Ello luego de que la Procuraduría Ambiental ya estableció sanciones y agotará recursos para buscar poner orden en el caso de los derrames de lixiviados y aguas negras en la región de la reserva ecológica.
Informó también de estas acciones a la institución federal a cargo de administrar las descargas de aguas residuales, ello a fin de que se busquen alternativas de cómo mejorar la situación y evidenciar que el municipio de Morelia no está cumpliendo con su responsabilidad de hacerse cargo de los usos que tiene dicho recurso natural.
Así mismo, explicó que en esa región existe una pequeña planta de tratamiento donde se estaban vertiendo aguas grises, pero hay una sospecha de que actualmente se están vertiendo aguas negras y la planta ya no tiene capacidad de sanear el líquido, situación que ya se está analizando, porque allí mismo se conectará un nuevo hospital que se construye en la zona, así como otros desarrollos que están al sur de Morelia.
El procurador determinó que es una situación que se está saliendo de la capacidad del Organismo Operador de Agua Potable, luego que ha cumplido con todos los requerimientos que ha solicitado la ProAm, pero en los mismos se detecta que no están regularizados, o en su defecto los desechos los está generando las urbanizaciones que se permitieron asentar en la parte alta.
Finalmente, explicó que hasta hace algunos meses las aguas que se vertían de manera descuidada en la parte sur de Morelia y que impactan en la reserva forestal Loma de Santa María, sólo eran aguas grises, es decir, apenas manchadas con algunos detergentes o que era utilizadas para servicios de limpieza, pero luego de las inspecciones realizadas se conoció que ahora hay también ya aguas negras, desechadas directamente por los servicios sanitarios.