No se vaya alcalde, primero vea lo que nos hace falta en la escuela #Fotos
Rodrigo Caballero/ @RodCaballero
Morelia, Michoacán. Mientras el alcalde de Morelia contaba chascarrillos a 300 estudiantes de secundaria a fin de que comprendieran que los que comenten bullying no serán exitosos en su vida adulta, un grupo de alumnas preparaba una emboscada para el presidente municipal, Alfonso Martínez Alcázar.
Justo al término del evento protocolario y tras la fotografía oficial, Alfonso Martínez se preparaba para salir de la Secundaria Técnica número 120 cuando cuatro alumnas lo interceptaron.
“No se vaya alcalde, primero vea lo que nos hace falta” dijo una de ellas mientras otra lo tomada de la mano y a paso apresurado lo sacaba del evento ante la mirada impotente del área de comunicación social del Ayuntamiento de Morelia.
Las demandas del alumnado incluían la malla ciclónica de la secundaria para evitar que los alumnos se salgan de clases y que jóvenes ajenos a la institución se metan a la escuela durante las tardeadas y convivios.
Además, falta el techo del patio principal, las jardineras y la cancha de fútbol que les prometieron a los estudiantes ya dos administraciones municipales distintas.
Isis Ortiz, Sarahí Díaz, Gloria Hernández y Sarahí Altamirano encararon al presidente municipal para que respondiera a sus demandas que con anterioridad han sido ignoradas por Wilfrido Lázaro Medina y Salvador Abud Mirabent.
Mientras tanto, Alfonso Martínez intentaba justificar que hacen falta 52 millones de pesos para que el Ayuntamiento de Morelia cierre el año en números negros y que existe una deuda a proveedores y bancos que necesita ser solventada.
Sin embargo fue inútil, después de varias promesas incumplidas los alumnos de la secundaria 120 no están dispuestos a aceptar largas a sus problemáticas. Alfonso Martínez fue conducido hasta las canchas de tierra y los terrenos baldíos y desnivelados que conforman gran parte de la escuela.
“Es peligroso que nuestros compañeros anden en esta parte” reclamaban mientras Alfonso Martínez intentaba dibujar con las manos una cancha de fútbol entre la maleza y las piedras.
-Le voy a echar un discurso- aclaró un alumno al alcalde mientras le llamaba la atención picándole el hombro en reiteradas ocasiones.
Entonces el joven comenzó a leer su pliego petitorio escrito perfectamente en una hoja de libreta a rayas, con una mejor dicción de la que ha demostrado el presidente municipal en sus propios discursos.
Al terminar, el alcalde recibió tanto el discurso como el pliego petitorio con las demandas del alumnado para que les ofreciera soluciones a sus problemáticas.
Las alumnas piden además que haya un mayor acercamiento a eventos culturales y salidas de campo a fin de conocer museos, monumentos y parques no sólo en la ciudad de Morelia, razón por la que necesitan apoyos para transporte.
“Nuestros maestros no hacen paros, rara vez se falta a clases, no somos una escuela problemática” aseguraron los directivos quienes prometieron que 850 padres de familia y profesores están listos para contribuir a la construcción de lo que falta en la escuela secundaria.
Ante el asedio y fuera del alcance de su equipo, a Alfonso Martínez no le quedó de otra más que prometer que se dará seguimiento a sus exigencias y llevarse una copia del pliego petitorio escrito por los estudiantes del plantel.
-Pero fírmeme de recibido- aclaró la alumna antes de soltar los documentos y el alcalde firmó.