¿A qué le tienen miedo?

Rodrigo Caballero/ @RodCaballero

 Morelia, Michoacán. –Pues hasta donde nos dejen pasar los policías porque está cerrado el Ayuntamiento- aclaró el taxista.

-Ellos mismos se echan de cabeza, primero nos dicen que no pasa nada, que la seguridad está bien… si no pasa nada para qué tanto operativo ¿A qué le tienen miedo?- reflexionó antes de llegar al Centro Histórico.

Y es que en el Ayuntamiento de la ciudad de Morelia se presentaba el 4to Informe de Gobierno del presidente municipal sustituto, Salvador Abud Mirabent, bajo un operativo que incluyó 160 policías de dos distintas corporaciones.

Por un lado, la Fuerza Ciudadana se encargó de generar tráfico en el primer cuadro de la ciudad y por el otro el Grupo de Operaciones Especiales (GOE) instaló filtros de seguridad en torno al Ayuntamiento con policías antimotines y tiradores en azoteas.

Jesús Sánchez Noriega, comisario de la Dirección de Seguridad Municipal, aseguró que los filtros no eran por miedo a algo si no una mera precaución para brindar seguridad y despejar el tráfico.

Seguridad informe 2

A las once de la mañana oficiales del Estado Mayor presidencial bajaron las escaleras del patio principal del Ayuntamiento y comenzaron a despejar los pasillos “como una medida de seguridad” ante la llegada de la esposa de Salvador Jara Guerrero, gobernador sustituto de Michoacán, y del secretario de gobierno, Jaime Esparza Cortina.

-Primero traen un montón de paleros y luego no hayan donde meterlos- reclamó una invitada mientras era desalojada por la seguridad presidencial.

Después de varios intentos de imponer sus “medidas de seguridad”, los oficiales se dieron por vencidos y el informe inició con los pasillos abarrotados por reporteros, invitados, camarógrafos y funcionarios que no alcanzaron lugar en las sillas del municipio.

Un vacilada de filtros

Los elementos de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) instalaron cuatro filtros con detectores de metales que no pararon de sonar debido a que nadie revisaba a conciencia a quienes pasaban al informe.

-¿A dónde va?- preguntó el policía.

-Al informe- aclaró un funcionario.

-Pase- respondió y los arcos detectores sonaron sin que éste fuera revisado por alguna autoridad.

FILTRO ABUD4

La misma historia se repitió en el filtro de la esquina Corregidora con Galeana con diversos funcionarios que no tuvieron que mostrar acreditación alguna para pasar los arcos haciéndolos sonar impunemente.

Solamente vendedores ambulantes y personas que caminaban por el centro fueron obligados a hacer filas o se desviaron de su camino una cuadra para evitar las “medidas de seguridad”.

Algunos locatarios como los de la librería Hidalgo perdieron las ventas de toda la mañana porque no pudieron abrir sus tiendas y –los que pudieron- no tenían clientes por evitarse las filas de los arcos de seguridad.

Dos mujeres comerciantes se quedaron esperando que acabara el informe en una taquería preocupadas por recuperar las ventas caídas. “Los filtros son una vacilada, todos los que pasaron conmigo traían cosas de metal y nadie les dijo nada” aseguró mientras se preparaba para abrir su tienda.

Terminado el 4to informe a la una de la tarde, los oficiales retiraron las barricadas y dejaron pasar a las personas sin importar que los personajes como el secretario de gobierno, la esposa del gobernador y el presidente municipal seguían en el interior del Ayuntamiento.

FILTRO ABUD1

-¿Por qué quitaron los filtros si todavía hay gente en el Ayuntamiento?-

-Pues son órdenes, ya no se ocupaban- aclaró un elemento del Mando Unificado.